Asombrosa de principio a fin, hipnótica, superlativa, magistralmente tramposa... Siempre que oigo el famoso "poesía cinematográfica" se me levanta una ceja de puro escepticismo, pero en este caso no: es la pura verdad. Aún comprendiendo a aquellos que la tildan de artificio estético, The fall es fruto de un acto de inspiración de los que hay pocos cada década, y no solo en la asombrosa capacidad de Singh para la imagen sugerente, sino por un guión soberbio la hora de romper la barrera entre realidad y ficción. Como es un crimen ver esta película teniendo información previa, solo diré que es uno de los grandes cantos de amor al cine de los últimos años, pero de forma más amplia a la pura narración en sí y al poder de las palabras y de la imaginación de un niño, todo ello muy bien entrelazado con una trama dramática. En definitiva, película imprescindible que no puede dejar indiferente.