Me he debatido mucho si ver o no la quinta entrega de las aventuras de José Luis Torrente, el llamado brazo tonto de la ley. Una parte de mí creía que la fórmula se había acabado hacía tiempo, que Segura no podía contarnos ya nada más sobre este sujeto. Pero la otra parte, recordaba la experiencia de las dos primeras entregas. Pocas películas, como la segunda entrega, me han hecho llorar de risa y reír a carcajadas.

Tras el fiasco que fueron la tercera entrega (de donde se salva el prólogo, el cameo del Fary y poquito más) y la cuarta (de esta creo que no se salvaba nada) Segura vuelve a ponerse delante y tras las cámaras para dirigir la quinta entrega del James Bond casposo español. Siguiendo el referente de la anterior entrega, donde se “homenajeaba” a la maravillosa ‘Evasión o victoria’, ahora le toca el turno a ‘La cuadrilla de los once’ (o la reciente versión de Clooney & Pitt ‘Ocean’s Eleven’).

El mayor acierto de esta nueva entrega, es situarla en un futuro muy cercano, 2018, donde Cataluña se ha separado de España y juega la final del mundial de fútbol, Pablo Iglesias es el líder de la oposición, Rajoy sigue siendo presidente poniendo el IVA cultural en el 42%, España ha salido de la Unión Europea y ha vuelto a la peseta, y finalmente se ha creado Eurovegas. Este futuro apocalíptico, que bien podría ser real dentro de unos años bien podría tomarse a modo de crítica de la situación actual.

¿El resto? Pues lo de siempre, Torrente haciendo de las suyas con su habitual nivel de caspa y guarrería. ¿Sus secuaces? Cañita Brava, Barragán, Esteso… al menos Jesulín pega mejor y tiene más gracia ante la cámara que Paquirrín. ¿Alec Baldwin? Meando fuera del tiesto, no se sabe muy bien qué es lo que hace ahí metido, pero resulta divertido verle hacer de villano y a él también se lo pasa bien.

Y luego está la gran cantidad de nombres y amiguetes que se suman año a año a las propuestas de Segura. Siempre resulta divertido ver a Leo Harlem y Chiquito de la Calzada como guardias de seguridad en Eurovegas, o a Imanol Arias y el Gran Wyoming como agentes de seguridad de un aeropuerto. Falete, Mario Vaquerizo, Pajares, el Langui, Pedrerol, Roncero, D’Alessandro, Pablo Motos, Andreu Buenafuente, Josema Yuste, Ricardo Darín…

Todo esto sumado con dosis de espectacularidad justa (Segura sigue mejorando poco a poco a la hora de rodar complicadas escenas de acción), ‘Torrente 5: Operación Eurovegas’ es un punto de inflexión y mejoría respecto a las anteriores entregas. Se antoja insuficiente, pero puede ser la tendencia a seguir en futuras secuelas. Si sigue haciendo tantísimo dinero en toda España, seguro que tenemos Torrente para rato.

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