Después de su notable y anterior largometraje “Perdida” y de dirigir episodios de la serie “Mindhunter” por fin David Fincher, cineasta de títulos de culto como “El club de la lucha” ha regresado al cine con esta producción estadounidense que ha tardado muchos años en levantar el proyecto, ya que se trata de un guion escrito por Jack Fincher el padre del director que falleció en 2003 y no ha podido armarse hasta la entrada de la plataforma Netfkix como productora, en un caso similar al de la aclamada “Roma”.
Este es un drama biográfico entorno a Herman Mankiewicz, guionista de la exitosa 'Ciudadano Kane' de Orson Welles, que ofrece un repaso por su proceso de escritura, bajo el contexto de la industria de Hollywood de los años treinta y cuarenta. La película empieza con un tono cercano a la comedia para luego volverse cine negro a medida que conocemos los claroscuros del protagonista, del que se pone en valor su figura. La película resulta fascinante, hay momentos en que el espectador parece estar viendo un film de ese periodo de tiempo del que hace un homenaje, por el tono y en buena medida por la destacada fotografía en blanco y negro a cargo de Erik Messerschmidt. No obstante, hay algún momento a mitad de metraje que los largos diálogos pueden dejar escapar la atención al espectador y, en definitiva, aunque su desenlace está bien cerrado, no es una de esas películas muy emotivas sino de las de admirar su destreza. Además, cabe decir que en la segunda mitad se habla de la relación en aquella época del cine y la política, en los años de la Gran depresión, que puede tener un paralelismo con la crisis económica reciente.
También cabe mencionar la música compuesta por Trent Reznor y Atticus Ross (oscarizados por la excelente “La red social” del director) y la creíble ambientación de época. Hay que apuntar que para entender mejor “Mank” es recomendable haber visto “Ciudadano Kane” y conocer el Hollywood de ese periodo, ya que hay varios personajes reales que pueden no sonar al público. En cuanto al reparto de actores, Gary Oldman como el genio alcohólico Mankiewicz está inmensamente histriónico y apoteósico (sobre todo en su especie de monólogo hacia el final), pero la sorpresa la da Amanda Seyfried como la actriz Marion Davies de la que vemos la parte más madura por debajo de su simpatía, si bien tal vez a su personaje le falta una escena para rematar su actuación. Además, cuenta con actores como Charles Dance y Lily Collins como la ayudante secretaria del guionista (en un papel en principio similar al de “El instante más oscuro” donde trabajó con Gary Oldman por un personaje que le valió el Oscar).
En materia de premios, considero que “Mank” es una firme aspirante a la próxima temporada de premios y es probable que sea uno de los títulos más nominados en categorías principales y técnicas. Este singular y evocador film ha tenido un estreno limitado en salas de cine (donde es recomendable verla en versión oficial) antes de estrenarse en Netflix y da ganas de recuperar el título imprescindible de Orson Welles.

Valoración: 8
Lo mejor: la magnífica actuación de Oldman y la conseguida evocación a un tipo de cine lejos del actual.
Lo peor: no llega a tocar la fibra sensible del espectador como para alzarse con grandes premios.

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