Esta serie puede servir de manual para todos aquellos que quieran crear un producto tan vacío como una pompa de jabón.
Por favor, como he podido aguantar hasta el final del último capítulo... (en el momento en el que escribo esto, han confirmado una segunda temporada).

Te presentan un misterio, un inicio prometedor, un desarrollo atractivo, pero a mitad de temporada ya empiezas a mosquearte, pero la sigues viendo, no vaya a ser que el desenlace sea sorprendente...
Lo único sorprendente es la nota media a día de hoy de 6,6.

No pierdas el tiempo, aquí no hay nada que ver interesante. Hay una rica oferta de series en las que aprovechar ese par de horas diarias que podemos disfrutar de esta edad de oro de las series. Edad de Oro que permite que nos cuelen este tipo de productos donde no pasa nada, ni acción, ni dialogos interesantes, ni una triste moraleja nueva...

Si esta serie se hubiera hecho en España, la hubieramos puesto en su sitio desde el primer día, pero como es norteamericana y la ves en Netflix, pues que guais y listos somos todos, venga, vamos a regalar ochos y nueves a mansalva.

Decepcionante y cargante, creo que ya lo he dejado claro.