Ángeles con caras sucias es un título que una vez encontré en un libro titulado, “ 200 películas para creer”, cine con Fe sin necesidad de nombra a Dios.

Es de esas películas de otra época, de esas historias eternas pero contadas para otro público, hoy en día una historia contada y narrada así no tendría mucha cabida, es otra época, otro cine.

Sin embargo, a las personas que busquen un cine con fondo moral, tendrán una película eterna.
La historia se adentra en los barrios bajos y en la delincuencia de sus calles, y la razón por la que muchas personas de estos barrios se hunden en un círculo vicioso, la película muestra el lado religioso de estas almas perdidas y una solución espiritual al gran problema de estos bajos barrios.

Una película buena y entretenida, bien narrada y dirigida, pero pertenece a otra época.