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Voto de Sibila de Delfos:
7
Drama. Comedia Abdul Karim, conocido como 'El Munshi', se convirtió en siervo de la reina Victoria en el año 1887. Después de que el joven se ganase el afecto de la monarca, terminó siendo su secretario personal y confidente durante los últimos años de vida de la reina, algo que no fue bien recibido dentro de la Casa Real. (FILMAFFINITY)
24 de noviembre de 2017
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Stephen Frears filma con La reina Victoria y Abdul una película de lo más agradable y, por momentos, emotiva, divertida y dolorosa (atención a lo que hace el ya rey Alberto al final). La verdad es que también es una cinta realmente triste, porque todo el rato el espectador se pregunta por qué los súbditos y el hijo de la reina Victoria no la dejaban, sencillamente, ser feliz como buenamente le pareciera. Al final, lo que a Frears le interesa es el lado humano de Victoria, mostrárnosla como una mujer antes que como una soberana, con su espantosa soledad, su nostalgia, su corazón destrozado por la muerte de su marido y su curiosidad por seguir aprendiendo cosas nuevas pese a su avanzada edad. Ahí es donde reside el encanto de la película. La amistad entre la reina y su munshi desprende una ternura muy especial, y por ello da tanta rabia que a todo el mundo vea tan mal una relación que realmente no hacía tanto daño a nadie.
Pero sin duda, la principal razón por la que la película será recordada es por Judi Dench. Con 83 años, la oscarizada intérprete de Shakespeare in love ya tiene experiencia en dar vida a reinas (Isabel I en la cinta de John Madden y la propia Victoria en Mrs. Brown), pero tanto daría que no la tuviera. Dench es una de las mejores actrices del mundo, y seguramente de la historia. Tiene un dominio de la escena, de la comedia (ver cuando empieza a aprender urdu) y el drama (ver la escena en que llora recordando a su marido Alberto y a John Brown) apabullantes, y unos ojos y una expresión corporal que lo dicen todo. Llena la pantalla cada vez que aparece, y cuando está ella los demás saben que han de dejarle sitio y disfrutar del trabajo de una superdotada de la interpretación. Aun así, Tim Pigott-Smith, Eddie Izzard, Michael Gambon y por supuesto Ali Farzal realizan un sobrio y medido trabajo de acompañamiento a la Dama.
Notable mezcla de drama y comedia para acercarnos una curiosidad más de la longeva vida de quien fue soberana de medio mundo.

Lo mejor: Judi Dench y la ternura y encanto que desprende a historia.
Lo peor: Es un poco larga, lo que se nota en su ritmo.
Sibila de Delfos
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