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Voto de Sibila de Delfos:
9
Romance. Comedia. Drama En París, el amor está por todas partes: en sus bares y cafés, bajo la Torre Eiffel e incluso bajo tierra, en el metro. Algunos de los directores más prestigiosos del mundo fueron invitados a contar una historia ambientada en uno de los barrios de la ciudad. El resultado es un caleidoscopio de imágenes sobre la alegría de vivir, sobre extraños e inesperados encuentros y, especialmente, sobre el amor. Directores (transición de los ... [+]
18 de mayo de 2014
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New York, I love you es una película pesada y sosa.
Paris, je t'aime es todo lo contrario. Es prácticamente una obra maestra.

Es una película acerca del amor en todas sus facetas y estados. Hay cortos acerca de amores nacientes, de amores que se han terminado, de amores que parecen muertos y vuelven a resurgir con fuerza, amores juveniles, amores que buscan mantener la llama encendida, amores paternofiliales, amores inesperados e incluso amores sobrenaturales y/o terroríficos. Todo ello enmarcado en el incomparable lujo de la eterna capital francesa, uno de los mejores platós naturales que el cine puede tener, y cuyas calles lucen mejor que nunca bajo la mirada de este conjunto de sensacionales artistas. Los mejores episodios son los de Gurinder Chadha, Isabel Coixet, los hermanos Coen, Tom Tykwer (vaya montaje), Alexander Payne y Wes Craven, pero la película entera es una delicia de ver por la sensibilidad y talento que desprende en cada frase y cada plano. Y en cada mirada, porque todos los actores sin excepción, los conocidos y los desconocidos, están simplemente soberbios. Atención a la pareja que forman Fanny Ardant y Bob Hoskins, a la mirada de Catalina Sandino Moreno, a la comicidad de Steve Buscemi o Rufus Sewell, a la profundidad emocional de Margo Martindale, al casi perfecto acento francés de esa fuerza de la naturaleza que es Maggie Gyllenhaal (no me cansaré de decirlo: pocas actrices hay más todoterreno que ella), a la tristeza y amor de Sergio Castellitto, a la naturalidad y encanto de Cyril Descours. Tantas cosas y tanto talento.
Imprescindible.

Lo mejor: Casi todo.
Lo peor: No todas las historias son igual de interesantes, aunque incluso las más flojas tienen algo especial.
Sibila de Delfos
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