Me fastidian los personajes de Sarah y Brian. Cada vez que aparecen me sacan de la película. Me habría gustado que su tiempo se hubiera repartido entre los demás, cuyas escenas se me quedan algo cortas. Si tan importante era para el director que la pandilla original estuviera al completo, podría haber hecho presente a Sarah con algún que otro recuerdo de anécdotas, alguna foto.

Aunque irregular, me parece una película interesante. Sirve bien para reflexionar sobre la amistad y el comportamiento propio y ajeno. Y para admirar a actores como Emma Thompson y Hugh Laurie.