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España España · Madrid
Voto de Sanjuan:
7
Comedia. Drama Nic (Annette Benning) y Jules (Julianne Moore) son una pareja de lesbianas que viven con sus dos hijos adolescentes: Joni (Mia Wasikowska) y Laser (Josh Hutcherson), ambos fruto de la inseminación artificial. Lo que obsesiona a los dos chicos es conocer a su padre biológico, un tal Paul (Mark Ruffalo), que donó su semen a una clínica cuando era joven. Recién cumplidos los 18 años, Joni se acoge al derecho de solicitar información sobre ... [+]
24 de enero de 2011
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
De nuevo el cine independiente americano nos deja una sorpresa en forma de comedia dramática en la que Lisa Cholodenko nos entrega la historia de Nic y Jules, una pareja de lesbianas en cuya espalda recae la responsabilidad de la educación de dos adolescentes. La trama no tendría mayor trascendencia de no ser por la incipiente curiosidad de estos dos jovenzuelos en averiguar la identidad del donante de semen que dejó embarazada a sus madres.

No sabría explicar el porqué no me convence la manera en la que toda la historia se origína pero el caso es que una vez planteada la situación, madres por un lado, adolescentes por otro y el donante en medio de todos, la sucesión de la historia va ganando enteros progresivamente porque consigue que el espectador acabe siendo uno más de la familia.
Con un notable guión, el relato cuenta de una manera muy humana, el tambaleo emocional entre las inconmensurables Bening y Moore, cabezas de familia, que supone la entrada en escena del donante, un efectivo Mark Ruffalo, más carismático que de costumbre, al que el papel le va como anillo al dedo.

Nada de moralinas ocultas ni dobles mensajes, Cholodenko nos deja un film sobre la importancia de la comunicación en la pareja y el peligro de la rutina, ni más ni menos, más allá del sentido y la responsabilidad paternal/maternal de las parejas homosexuales. Aquí nada tienen que ver las costumbres ni la moral de la época en la que vivimos.

Rodada expeditivamente, con detalles muy sutiles, la directora acierta de pleno con la realización y dirección de estas dos grandiosas actrices de las que resulta enormemente difícil elevar a una por encima de la otra. Son dos madres modernas, muy cercanas, con un sentido práctico de la familia, responsables, que tienen los mismos problemas e inquietudes a la hora de aconsejar y ayudar a sus hijos que cualquier otra familia y que además, pese a que pueda parecer tópico, esa supuesta desestabilización que genera la entrada del padre genético acaba reforzando la relación.

Pese a que el final puede parecer el más fácil posible, alguna escena innecesaria y algún que otro tópico disperso por el metraje, lo cierto es que me ha gustado el mensaje, la mezcla de comedia y drama, la dirección de la californiana en el que nos plantea un estilo de vida totalmente saludable, su magnífico guión y ese inmenso duelo interpretatívo entre dos de las mejores actrices pertenecientes al grupo de las “maduritas”, esa Benning contenida, que habla con la mirada, irónica, que sabe sacar el genio cuando la situación lo requiere y esa Moore infinitamente más dulce, cercana y tal vez más permisible e influenciable. Como grandes que son, ni una sombra de sobreactuación en ninguna de ellas, estaría bueno.

En fín, un soplito de aire de los que se agradecen, de verdad que sí.
Sanjuan
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