Es probable que esta película sea al día de hoy la chorrada más grande que mis ojos de cinéfila hayan visto jamás. Pero ese es el eje de la cuestión. Empecemos por definir algo importante, el intentar creerse el relato podría ser el primer gran error del espectador. Sería muy inocente pensar que algo de lo que Coppola cuenta tiene cabida en nuestra realidad, funciona más como una leyenda -aunque nunca llega a tal tono-.

Ahí va un trabalenguas: tiene sentido que la película no tenga sentido porque trata de mostrar el sinsentido de la comunidad. Las actitudes de los personajes son absurdas, y en esto el premio mayor no se lo llevan los adolescentes, sino que los más contradictorios en su accionar son los mayores. Tanto los padres de las 5 hermanas doradas como los padres de los otros jóvenes tienen actitudes hipócritas y poco justificables. De esta forma los adolescentes de este barrio se ven inmersos en una vorágine de sucesos irreales provocados por reacciones irreales de personas irreales.

"Las vírgenes suicidas" me recuerda a la metáfora de un regalo bien envuelto. Es cuando ves un paquete envuelto en el mejor papel y te da pena romperlo para ver que hay dentro, o cuando ves una torta tan bien decorada que no quieres comerla para no tener que cortarla y arruinar el diseño. Eso es este film de la Coppola, una cinta que bien puede estar completamente vacía en su interior y yo jamás me daré cuenta porque no abriré el paquete por miedo a romper su fascinante y embriagante envoltorio.

La película no deja indiferente a nadie y por eso es entendible la cantidad de detractores que posee, es un cine diferente hecho para un grupo reducido de admiradores que nos dejamos engañar conscientemente por la Coppola. Es un ejercicio de estilo y no un intento de explicar el comportamiento adolescente, ese es el mayor error de muchos, creer que los jóvenes de este film responden a los estereotipos de la sociedad. Coppola utiliza la historia al servicio de su cámara para crear un estilo propio. Ese estilo es el que me engatusa, me fascina la forma de dirigir de Sofia Coppola, su humor negro, su delicadeza y ese total artificio de las imágenes. El tono enigmático e incoherente que le aporta a la historia me apasiona. Sin dudas una película difícil de olvidar.

Kristen Dunst está impecable. Creo que Coppola fue la primera persona en aprovechar la belleza de esta actriz, el otro fue Von Trier en su reciente "Melancolía" (2011). A diferencia de los que la conocieron como la Mary Jane de la trilogía de Raimi, aquí la actriz desprende un brillo natural que acompaña perfectamente la estética del film. Aunque la historia hable de 5 hermanas, claramente Coppola se centra en Dunst y acierta con creces al hacerlo.

Como detalle final destacar la banda sonora, no sólo los temas originales de Air, sino además el compilado de canciones seleccionadas entre las que se encuentran temas de las Heart o el maravilloso "The air that I breathe" de los Hollies.

Lo mejor: la dirección de Coppola.
Lo peor: los que descubran el vacío y la incoherencia del relato se verán desilusionados. No tiene gracia conocer los trucos del mago.