Media votos
6,3
Votos
1.406
Críticas
85
Listas
1
Recomendaciones
- Sus votaciones a categorías
- Contacto
-
Compartir su perfil
Voto de isaak:
2
4,0
4.205
Bélico. Acción
El coronel Braddock (Chuck Norris) escapó hace ya 10 años de un campo de prisioneros cuando estuvo combatiendo en la guerra del Vietnam. Ahora volverá de nuevo a dicho país para intentar rescatar a varios soldados norteamericanos capturados en el conflicto, y que se sabe siguen en cautividad y vivos tras todo este tiempo. (FILMAFFINITY)
3 de octubre de 2006
11 de 22 usuarios han encontrado esta crítica útil
De niño te gusta, porque eres muy ingenuo y bueno te gusta la acción, (violencia) sin prestarle mucha atención al guión, la historia super-facha. De mayor, te das cuenta que es un "super-bodrio" a lo Rambo (pero aún, mucho peor).
Que decir sobre el protagonista de la historia y el personaje, que está detrás de ella, que no lo haya dicho ya, Txarly.
Que decir sobre el protagonista de la historia y el personaje, que está detrás de ella, que no lo haya dicho ya, Txarly.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
(Monólogo) Tributo al maestro "Txarly", que con sus "puntos" nos ha hecho disfrutar del fiera de Chuck Norris.
Un amigo mio conoció a Norris, y casi este le parte la cara por llamarle por el nombre, "Chuck" (Solo le pueden llamar así sus amigos, Seagal, Stallone, "Swasteinaguier"). Su madre, cuando nació le iba a poner Chup, pero dado a la semejanza con la marca de chupa-chups, decidió no hacerlo porque Chuck, solo puede haber uno y sabía que de mayor, los eliminaría a todos. Este le dijo a mi amigo, que su madre nunca empujó para sacarlo, el salió de la "cueva" porque le daba la gana.
Después de diez minutos de conversación, Chuck Norris ya veía a mi amigo como un enemigo, viéndole de reojo. Pero le daba cancha, para seguirle el juego, después de tanta pregunta. Chuck, mejor, el señor Norris (mejor, no sea que...) le explicó que una vez saliendo de caza, le ofrecieron el típico rifle (de caza) para matar patos y el dijo: "con un escupitajo ascendente, mataré a los veinte patos (en grupo)". Así fue.
Otro día lo intentó con un águila. También fue.
A la hora de conversación, un aburrido sr. Norris le informó a mi amigo de que "la iba a palmar", por plasta. Mi amigo exclamó "Clemencia" y Chuck le señaló con el dedo pulgar para abajo y le dijo: "Clemencia es el nombre de mi hermana. Razón porque nunca me llevo bien con ella". Mi amigo, mientras lloraba: "por favor, por lo menos déjame el honor del último deseo" El sr. Norris accedió de concederle su cigarrillo. Fumárselo y caer con la dignidad bien alta. De las últimas palabras que se le recuerdan haber dicho al sr. Norris es: "Dolor, mucho dolor".
Un amigo mio conoció a Norris, y casi este le parte la cara por llamarle por el nombre, "Chuck" (Solo le pueden llamar así sus amigos, Seagal, Stallone, "Swasteinaguier"). Su madre, cuando nació le iba a poner Chup, pero dado a la semejanza con la marca de chupa-chups, decidió no hacerlo porque Chuck, solo puede haber uno y sabía que de mayor, los eliminaría a todos. Este le dijo a mi amigo, que su madre nunca empujó para sacarlo, el salió de la "cueva" porque le daba la gana.
Después de diez minutos de conversación, Chuck Norris ya veía a mi amigo como un enemigo, viéndole de reojo. Pero le daba cancha, para seguirle el juego, después de tanta pregunta. Chuck, mejor, el señor Norris (mejor, no sea que...) le explicó que una vez saliendo de caza, le ofrecieron el típico rifle (de caza) para matar patos y el dijo: "con un escupitajo ascendente, mataré a los veinte patos (en grupo)". Así fue.
Otro día lo intentó con un águila. También fue.
A la hora de conversación, un aburrido sr. Norris le informó a mi amigo de que "la iba a palmar", por plasta. Mi amigo exclamó "Clemencia" y Chuck le señaló con el dedo pulgar para abajo y le dijo: "Clemencia es el nombre de mi hermana. Razón porque nunca me llevo bien con ella". Mi amigo, mientras lloraba: "por favor, por lo menos déjame el honor del último deseo" El sr. Norris accedió de concederle su cigarrillo. Fumárselo y caer con la dignidad bien alta. De las últimas palabras que se le recuerdan haber dicho al sr. Norris es: "Dolor, mucho dolor".