Hay con ciertas películas el eterno dilema de si con unos buenos actores en la misma es suficiente para salvar de la quema la historia o viceversa, pero en el caso que nos ocupa comprobamos que no siempre es así.
En un OCEANO ENTRE NOSOTROS, asistimos a la peripecia vital de este hombre que se lanzo a la mar prácticamente sin experiencia en un trimarán para dar la vuelta al mundo sin escalas, una historia a priori interesante más si tenemos en cuenta que esta basada en hechos reales.
Los siempre solventes COLIN FIRTH, y RACHEL WEISZ, no son suficientes a pesar de hacerlo muy bien, para lograr transmitir lo que en este film hubiese sido necesario, con todas las angustias, temores y dudas ante tamaña aventura, con lo cual se queda en una peli anodina plana y sin mucha gracia, tampoco explotan los bellos paisajes ni la fotografía ni nos logra encandilar su banda sonora.
Por todo ello el trabajo del director JAMES MARSH, se queda en eso, en mera anécdota y poco perdurable en nuestra memoria cinéfila.