RED STATE, tiene un comienzo prometedor pero rápidamente se va desinflando, hasta no saber muy bien a donde se dirige, ni que nos quiere contar, he de reconocer que no sabía que estaba dirigida por el icónico KEVIN SMITH, que tuvo su momento de gloria hace años y que ahora mismo estaba un poco desaparecido del mapa.
Se asemeja por momentos viendo la premisa a una clásica peli de terror con adolescentes ávidos de sexo, pero nos sorprende con varios giros, y el tema de las sectas y el fanatismo religioso, mezclado con muchos tiroteos y acción descerebrada.
El monólogo del bueno de MICHAEL PARKS, se alarga en demasía y tanto que provoca el bostezo y el aburrimiento generalizado, y creo sinceramente que el final tampoco está a la altura para considerar esta obra, como algo perdurable en la carrera del director, pero a pesar de todo se deja ver el film.