Cuántas grandes películas, obras de arte, libros, ideas en general se han visto minusvaloradas por haberse lanzado al mismo tiempo o poco después que otra similar, con mucho predicamento o con más publicidad o, simplemente, más tempranamente expuesta, como digo. El caso que se nos viene a la mente es Amenábas y LOS OTROS o VALMONT, luchando ambos contra colosos que se adelantaron por muy poco a ellos (EL SEXTO SENTIDO o LAS AMISTADES PELIGROSAS). En cualquier caso, el tiempo siempre acaba recompensando la calidad, como en estos dos casos sucedió, incluso muy pronto. Espero que suceda con esta serie británica, tan cuidada como cualquier producto de por allí, con actores de gran envergadura, buenos guiones, bien estructurada y ambientada, que se ha visto eclipsada por la no menos magnífica THE CROWN, multipremiada y aplaudida en Europa y en Estados Unidos. Sin dejar de ser una hagiografía de la reina Victoria, esta serie nos pasea por situaciones y momentos claves de su reinado, poniendo en conocimiento de forma pedagógica momentos tan importantes como la llegada y pujanza del ferrocarril, la hambruna de la patata en Irlanda, los atentados o intentos de atentados contra Victoria y su entorno, la esclavitud y el comienzo de su rechazo y otros muchos. En el lado más negativo, quizás la visión de la reina y su entorno es en exceso bienintencionada y muy edulcorada en ciertos momentos. Aparecen y desaparecen personajes sin mucha razón para ello. Pero, con todo, una buena serie de TV con un aspecto didáctico que, en mi caso, agradezco.