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Voto de Luis Guillermo Cardona:
4
Western En 1870, un forastero (Clint Eastwood) pasa a caballo por la tumba de Jim Duncan, antiguo sheriff de la ciudad fronteriza de Lago, en el sudoeste de Estados Unidos. Los propietarios de la compañía minera, Dave Drake (Mitchell Ryan) y Morgan Allen (Jack Ging) lo contratan para que los defienda de tres pistoleros que, recién salidos de la cárcel, están a punto de llegar a la ciudad. El forastero acepta el trato a condición de hacer las ... [+]
10 de diciembre de 2014
26 de 35 usuarios han encontrado esta crítica útil
Cuando, Clint Eastwood, tuvo en sus manos el guion que, Ernest Tidyman, escribió con el título, “High plains drifter”, su idea primigenia fue hacer con él un spaghetti western en tono de comedia, quizás para demostrarle a su maestro, Sergio Leone (¡y a nosotros por supuesto!), que había aprendido bien las lecciones que de él había recibido. Era una manera de emular, y elogiar, a quien lo había llevado al éxito... y para que no quedara duda, su personaje mantuvo el carácter de, “el hombre sin nombre”, que interpretase en los filmes del director italiano.

Al momento de rodar, la historia es abierta con un generoso y atractivo juego de situaciones, donde las bromas van y vienen, filmando en un pueblecito llamado Lago, que huele a nuevo por todos los costados, incluidos sus interiores; que ostenta ventanales todavía no creados a finales del siglo XIX; y que luce pulcro -con excepción de la puerta del barbero que alguien ensució de seguro durante el rodaje- como si se prepararan para la visita del presidente.

El argumento no es para nada pretencioso y todo hace presentir que, Eastwood, tan solo se propone hacerse con otro puñado de dólares, brindándonos un ejercicio más de entretenida y rancia venganza, de lo cual sabía bastante por aquellos tiempos; y nos daremos cuenta, luego, que no erramos en nuestra apreciación, pero, en la segunda parte de la historia, donde el tono se torna bastante serio, ocurrió que, estando ya en tiempo de las previews, alguien -o el mismo Eastwood- sintió que, entre las imágenes, había cuando menos dos o tres que hacían lucir el filme con un toque sobrenatural… y se llegó entonces a la ocurrencia de que, cortando una frase: “He was my brother” (Él era mi hermano) que, en algún momento pronuncia "el extranjero", y eliminando de los créditos a, Buddy Van Horn, quien representó al sheriff Jim Duncan, el personaje de Eastwood podía lucir como si fuese el mismísimo Duncan que resucitó (¿?) o salió de su tumba para cobrar venganza. La fe de los espectadores haría el resto.

Pero, cuando alguien aclaró que ya se habían enviado las copias a Europa con el respectivo guion para los doblajes ¡donde permanecía la frase que iba a cortarse!, se determinó hacer las variaciones para EE.UU. y el resto de América, donde se sugirió que el filme fuera titulado, “La Venganza del Muerto”.

De esta forma, se logró conquistar a un mayor sector del público ¡y hasta hubo críticos que se devanaron los sesos buscándole misticismo al cuento!, cuando lo logrado por, Eastwood, no fue más que un golpe de suerte y no algo planeado a conciencia. Así, de <<INFIERNO DE COBARDES>>, surgieron dos apreciaciones distintas que todavía se conservan, aunque, en las ediciones recientes en DVD, ya se publica sólo la versión americana.

Con todo y sea cual sea la versión que usted vea, estamos ante una historia para nada verosímil que, en tal sentido, era más fácil digerirla en su tono de comedia. (Citaré aquí escenas claves) Ese “pistolero invencible”, que decide abusar del generoso convenio que establece con la gente de un pueblo que anda temerosa de la salida de la cárcel de unos bandidos que, presumen, regresarán para cobrar venganza, ¿Cómo es que entrena a los varones y ninguno aprende a darle a tres muñecos a diez metros de distancia?, ¿Cómo es que viola a una mujer y nadie se preocupa de reclamarle por este aberrante hecho? ¿Para qué diablos hace construir unas mesas tipo banquete si no van a usarse?... Y lo que se me hace más inexplicable: ¡Cómo ha de ser que los dueños de la mina (Drake y sus compinches), que lucen duros e inescrupulosos, entran y se sostienen en el absurdo y abusivo juego de “el extranjero”, cuando ellos mismos deben ya saber que sus enemigos son tres bobalicones a quienes nadie respeta!

Por todo esto, resulta pretencioso y exagerado, cuando el filme dizque adquiere ese tono “infernal” que, con todo lo que ha pasado, hay que ser muy dócil para tomarlo en serio.

Título para Latinoamérica: LA VENGANZA DEL MUERTO
Luis Guillermo Cardona
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