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Voto de Luis Guillermo Cardona:
8
21 de enero de 2023
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Partiendo del guion que, Howard Estabrook (basado en la novela de Owen Wister y en la obra teatral que éste escribiera junto a Kirk La Shelle), adaptara para, “El Virginiano” (Victor Fleming, 1929), los acreditados guionistas, Frances Goodrich y Albert Hackett, quienes hicieran equipo en “The Thin Man” (1934), “Another the Thin Man” (1939), “I’ts a Wonderful Life” (1946) y otras valiosas películas posteriores, tuvieron aquí su primer y único acercamiento al género western, y tengo que decir que, habiendo visto previamente la versión de Fleming, me siento como cuando uno sale del túnel de una profunda mina y en sus ojos se refleja el paisaje y la luz del sol.
La ambientación, la fotografía, el sonido, el aspecto de los personajes… –aunque quizás menos auténticos (en relación con los años 1880) que los del filme de 1929-, en todo caso resultan más complacientes a la vista, además de que fue muy atinado que la nueva trama eliminase las escenas indebidas (la presencia de una menor en el bar dispuesta a dejarse seducir y la terrible “broma” con los bebés) y también define mucho mejor algunas situaciones que, en el filme de Fleming, resultaron bastante deficientes (el disparo de Trampas a las tres copas; la secuencia de la ejecución; el enfrentamiento final…) y solo tengo que decir que la famosa escena donde, El Virginiano conmina a Trampas con la célebre frase: “Si quieres decirme eso, sonríe”, no resultó tan bien definida como cuando la hizo, Gary Cooper.
Se dijo que la base de la historia de, <<EL VIRGINIANO>>, se inspiró en la llamada Guerra del Condado de Johnson (Wyoming, 1892) cuando se generó un grave conflicto entre ganaderos y granjeros. Tema que también ha sido tratado en filmes como: “Shane”, “Heaven’s Gate” y otros.
Los diálogos escritos por Goodrich y Hackett –aunque respetan buena parte de los diálogos originales- también añaden algunos realmente certeros. Veamos un ejemplo:
-1.500 para cada uno -dice Steve a su jefe Trampas tras hacer un asunto sucio.
-Te olvidas del sheriff -Reclama éste.
-¿Qué ha hecho él?
-¡Nada de nada! Eso vale algo, no?
En cuanto al reparto: Joel McCrea, nos ofrece un carácter más recio y varonil, y en cada situación resulta bien puesto y seguro como debe ser. Brian Donlevy, también lo hace muy bien en su rol de jugador pendenciero y empedernido cuatrero. Sony Tufs, muy carismático haciendo de Steve, el amigo inadaptado que resulta muy sobrio en la escena cumbre de su actuación… y Barbara Britton, como suele ocurrir, nos deslumbra con su radiante belleza, y su personaje desborda encanto aún en su manera de ser. En esas escenas en que se muestra temerosa, provoca protegerla como si se tratara de un tesoro.
En fin que, <<EL VIRGINIANO>>, que dirigiera Stuart Gilmore, nos deja complacidos y siento que, al fin se logró asentar en su punto justo, una historia que, sin duda, es muy gratificante.
La ambientación, la fotografía, el sonido, el aspecto de los personajes… –aunque quizás menos auténticos (en relación con los años 1880) que los del filme de 1929-, en todo caso resultan más complacientes a la vista, además de que fue muy atinado que la nueva trama eliminase las escenas indebidas (la presencia de una menor en el bar dispuesta a dejarse seducir y la terrible “broma” con los bebés) y también define mucho mejor algunas situaciones que, en el filme de Fleming, resultaron bastante deficientes (el disparo de Trampas a las tres copas; la secuencia de la ejecución; el enfrentamiento final…) y solo tengo que decir que la famosa escena donde, El Virginiano conmina a Trampas con la célebre frase: “Si quieres decirme eso, sonríe”, no resultó tan bien definida como cuando la hizo, Gary Cooper.
Se dijo que la base de la historia de, <<EL VIRGINIANO>>, se inspiró en la llamada Guerra del Condado de Johnson (Wyoming, 1892) cuando se generó un grave conflicto entre ganaderos y granjeros. Tema que también ha sido tratado en filmes como: “Shane”, “Heaven’s Gate” y otros.
Los diálogos escritos por Goodrich y Hackett –aunque respetan buena parte de los diálogos originales- también añaden algunos realmente certeros. Veamos un ejemplo:
-1.500 para cada uno -dice Steve a su jefe Trampas tras hacer un asunto sucio.
-Te olvidas del sheriff -Reclama éste.
-¿Qué ha hecho él?
-¡Nada de nada! Eso vale algo, no?
En cuanto al reparto: Joel McCrea, nos ofrece un carácter más recio y varonil, y en cada situación resulta bien puesto y seguro como debe ser. Brian Donlevy, también lo hace muy bien en su rol de jugador pendenciero y empedernido cuatrero. Sony Tufs, muy carismático haciendo de Steve, el amigo inadaptado que resulta muy sobrio en la escena cumbre de su actuación… y Barbara Britton, como suele ocurrir, nos deslumbra con su radiante belleza, y su personaje desborda encanto aún en su manera de ser. En esas escenas en que se muestra temerosa, provoca protegerla como si se tratara de un tesoro.
En fin que, <<EL VIRGINIANO>>, que dirigiera Stuart Gilmore, nos deja complacidos y siento que, al fin se logró asentar en su punto justo, una historia que, sin duda, es muy gratificante.