Se trata de una de las historias más conocidas de Stephen King que sin embargo deja mucho que desear. La verdad es que es una de las peores historias del autor que he conocido. Aunque el desarrollo de la película no se hace aburrido, tampoco es nada sorprendente y mucho menos, terrorífico. Los chicos no dan ningún miedo, sobre todo los líderes, Malacai e Isaac que además tienen una actuación patética y estúpida.
La idea de la que parte es buena, basando el terror en los maizales, lugares que pueden ser espeluzantes pero la religión absurda del pueblo y los sucesos extraños del cielo y la tierra destrozan todo.
Destacables escenas, la matanza de la cafetería del principio únicamente.
Buena interpretación por parte de Linda Hamilton quién compensa la poco natural actuación de Peter Horton.
Una película para pasar la tarde.