Media votos
6,8
Votos
833
Críticas
271
Listas
7
Recomendaciones
- Sus votaciones a categorías
- Mis críticas favoritas
- Contacto
-
Compartir su perfil
Voto de Kwisatz:
4
3 de junio de 2013
31 de 36 usuarios han encontrado esta crítica útil
De mi paciencia.
Mi tercera incursión en el cine de Bergman, y posiblemente la última en un periodo de tiempo… indeterminado.
Me voy de vacío y totalmente indiferente ante lo que pretende contarme este film.
Muy onírico todo, muy simbólico, muy tétrico, muchas caras atormentadas, muy buena fotografía. Pero me da igual. A mí no me ha transmitido nada, ni siquiera inquietud, sólo hartazgo de su plomiza atmósfera.
Por ahí he leído que si fantasmas personales del artista, que si amores no enterrados del pasado, que si homosexualidad reprimida, que si referencias satánicas, que si esto o lo otro.
De acuerdo, me lo creo. No va a ser este ignorante quien lo desmienta.
Pero si necesito leerme un manual para extraerle un mínimo sentido a una película, mal vamos. Eso es abusar del espectador. Sobre todo de uno que ha peleado heroicamente contra el sopor de la sobremesa. Si te gusta exprimirte el coco e interpretar cada fotograma para hallar sus trascendentales mensajes, por mi perfecto.
Tú mismo, masoquista intelectual.
Mi tercera incursión en el cine de Bergman, y posiblemente la última en un periodo de tiempo… indeterminado.
Me voy de vacío y totalmente indiferente ante lo que pretende contarme este film.
Muy onírico todo, muy simbólico, muy tétrico, muchas caras atormentadas, muy buena fotografía. Pero me da igual. A mí no me ha transmitido nada, ni siquiera inquietud, sólo hartazgo de su plomiza atmósfera.
Por ahí he leído que si fantasmas personales del artista, que si amores no enterrados del pasado, que si homosexualidad reprimida, que si referencias satánicas, que si esto o lo otro.
De acuerdo, me lo creo. No va a ser este ignorante quien lo desmienta.
Pero si necesito leerme un manual para extraerle un mínimo sentido a una película, mal vamos. Eso es abusar del espectador. Sobre todo de uno que ha peleado heroicamente contra el sopor de la sobremesa. Si te gusta exprimirte el coco e interpretar cada fotograma para hallar sus trascendentales mensajes, por mi perfecto.
Tú mismo, masoquista intelectual.