Una acumulación de clichés psicológicos y filosóficos, muchos conceptos mal planteados (parece que se tomó de Freud sólo su primera época, cuando hacía hipnosis -en realidad, era un mal hipnotizador y esto le permitió desarrollar su técnica de la asociación libre - y relacionaba la histeria con la falta de sexo, se olvidaron cuarenta años de Freud y ni se asomaron por Lacan). Mezcla de terapias y corrientes psicológicas. Como thriller zafa, pero también es cliché de muchos films norteamericanos. Plantea que el inconciente quiere proteger al sujeto... este concepto es totalmente errado. El inconciente no protege de nada, en todo caso, la verdad del sujeto (que anida en el inconciente, según Freud) pugna por vencer la barrera de la censura y hacerse conciente. Es la "conciencia" quien busca protegerse de aquellas representaciones inconciliables (Freud en pañales es esto). La alegoría de la caverna de Platón está bien contada, aunque le falta una parte. En fin, los conceptos tomados muy como los entiende el vulgo. Recomendable por la dirección de arte, y algunas escenas bien planteadas. La actuación de la actríz más joven, malísima. La psicóloga me gustó.