Uno de los aspectos destacados de la película es el manejo de la tensión por parte del director Gonzalo Bendala. Logra crear una atmósfera de angustia e incomodidad que mantiene al espectador en suspenso. Además, la actuación de Julián Villagrán y Ester Expósito ha sido elogiada, destacando su capacidad para transmitir el terror y el pánico que experimenta sus personajes.

Sin embargo, la trama de la película incluye elementos inverosímiles e incongruentes. Hay demasiadas coincidencias en la historia, lo que dificulta su credibilidad. Además, el guion es corto e introduce elementos poco relevantes que no aportan mucho a la trama principal.

En general, parece que la película logra entretener con su suspenso y las actuaciones destacadas. Sin embargo, también tiene fallos en términos de coherencia de la trama y exageraciones en algunas situaciones.

Es una película promedio. Aunque logra generar tensión y cuenta con buenas actuaciones, los problemas en la trama y la falta de coherencia en algunos momentos pueden afectar la experiencia del espectador. Tal vez sea una película adecuada para ver si buscas entretenimiento, pero no esperes una trama muy sólida o realista.