Creo que estamos ante una más que aceptable película, pero lejos de las alabanzas de algunas de las críticas, y me refiero también a críticos profesionales, que he leído. Este thriller a la española me ha entretenido, no es pesado, aunque a media proyección, se tambalea, adolece de cierta falta de ritmo. Doy por bien empleado el tiempo y el dinero. José Coronado, un tipo hasta ahora guapo, que normalmente cae bien, con un toque un poco canalla, convence y se luce, no me extrañaría que se llevara algún premio importante. Este es uno de los valores fundamentales de la cinta.
Detecto en ella alguna laguna para mi importante, cómo por ejemplo esa falta de ritmo a la que aludía, no me refiero a un ritmo de acción propiamente dicho, más bien a un ritmo de guión, no pasa nada relevante durante un buen rato, hay más de un momento en el que la historia parece que se agota, sobre todo cuando la jueza entra en acción, no encaja ahí y es muy poco creíble, aunque probablemente en la realidad estas cosas sucedan. Afortunadamente consigue remontar el vuelo y superar esa fase anodina. Hay una parte de la trama decisiva y no muy bien explicada o mostrada, un momento en que parece que el protagonista echa a perder la pista que seguía y luego como por arte de magia la recupera. Pero sobre todo el arranque, me parece muy exagerado, si lo que a continuación queremos contar pretendemos que posea credibilidad.
Pero en general veo más aciertos que inconvenientes y me ha complacido, sobre todo insisto en destacar a Coronado y a Juanjo Artero, creo que hace también un muy aceptable trabajo. Y muy importante es que tiene un buen final, los finales que casi siempre restan a la historia, en este caso añade valor a la misma.