"El Lobo" no podrá ser considerada la mejor película sobre el entramado de ETA gracias a la famosa metedura de pata de su productor, el periodista Melchor Miralles, quien falseó una entrevista con el verdadero agente Mikel Lejarza. Por culpa de este hecho posterior, ya no sabemos si la película ofrece una credibilidad al 100%. Si esto no hubiera sucedido, me atrevería a decir que supera a la gran "Días contados", de Imanol Uribe, pues refleja perfectamente la red en la que se movía ETA, las distintas posiciones de sus miembros y, sobre todo, cómo se preparaban los operativos, los pisos francos, etc.
Además, las interpretaciones y los efectos especiales son magníficos. No llega al 9 ni al 10 por lo que he dicho antes y por ser un tema desarrollado en un ambiente monótono (pero es que no se podía hacer de otra manera)