Cuando leo/veo casos como el que nos describe el film, tiendo a recuperar la fe, o mejor dicho, tiendo a convencerme de que por suerte, no todo en la iglesia es corrupción, pederastia ni ansias de hacerse rico.

Si al principio me sorprendió esa lenta andadura del film, a los 10 minutos había entendido qué nos estaba mostrando, una reducida comunidad entregada plenamente al amor al prójimo. Indispensables las escenas de rezo y cantos, sino no te imbuyes de su manera de ser y vivir. Y los paisajes preciosos !

Algo que me ha gustado especialmente es que no hay música de fondo, en lo alto de las montañas del Magreb mucho ruido no puede haber y es necesario ese silencio en el que se oye como aran la tierra, o el rasgar de la pluma, o como caen los troncos para el fuego, para sentir más la paz y recogimiento del lugar.

Así que me encontré una joya que no esperaba, que me Hizo replantearme un montón de ideas que tengo arraigadas. No diré nada que pueda ser spoiler, o sea que aqui me callo, pero las escenas cercanas al final, cuando debaten que decisión tomaran frente al conflicto, son tiernas y dolorosas. Una lección de valentía.

Coincido con alguien que apuntaba que se necesita una sensibilidad especial para verla, muchos la encontraran aburrida, lenta y tediosa, nada más lejos.