Me parece una buena película, una trama bien escrita y dirigida donde se muestra un ambiente empresarial cargante, no me explico que nadie quiera trabajar en empresas así (de todo hay en la viña del señor, claro) pero lo mejor de la película es sin duda Maribel Verdú, su trabajo es lo que merece la pena ver, independientemente del buen guión y de las actuaciones del resto del reparto, también positiva, en ella recae y lleva con soltura todo el peso de la película.
Aparte de eso, la película es una acertada crítica social a las grandes corporaciones donde la cuenta de resultados y las apreciaciones en bolsa son más importantes que cualquier empleado. Deshumanización del capitalismo. A la mínima muestra señal de sentimiento, o te marchas o te suicidas.