Yo no sé que ocurre con las películas de Marvel, pero no hay ninguna que pueda considerarse obra de arte, pese a que muchas tienen la nota inflada. Clara señal de que solo los más fans votan a favor de estos films.
Pero vayamos al grano. Como ya va siendo habitual en las películas de este estilo, el inicio queda marcado por una parte graciosa que incluso consigue sacarte alguna risa, pero pasado un tercio de película, todo se desbarata y comienza el auténtico horror fílmico que tenemos delante.
Thor, para su desgracia es una película muy simplona, con un argumento muy simplón, y con unos personajes con cero de carisma y vestidos con traje de gomaespuma.
Thor está escrita para niños, y como tal debe clasificarse, es una película sin fundamento que va de gracia en gracia y alguna hostia de por medio, pero como también es habitual en Marvel, la sangre destaca por su ausencia.
Solo disfrutable si pretendes pasar dos horas con tus hijos si los tienes, sino, salvo que sean auténticos fans de los cómics, no merece la pena perder el tiempo.