La realidad a veces no es tan impresionante como nosotros desearíamos, por eso a veces, es necesario un poco de mitología y fantasía para aderezarla. Tengo que reconocer que me gusta mucho pensar historias de cuentos, o versiones alternativas de series o películas, solamente para pasar el rato, además de la relación que tiene con su padre esto ha hecho que me siento muy identificado con su protagonista. Por lo que esta crítica será un poco más subjetiva de lo habitual.
Tim Burton ha logrado darle la magia justa a los relatos para que se sientan mágicos, pero no demasiada, para que no se volvieran historias de fantasía. El reflejo de la relación paternal entre el padre y su hijo, que tienen en común que les gusta contar historias, hace que el clímax de la película sea una de las escenas más bonitas que he visto.
En definitiva, reconozco que esta película no es perfecta, pero ha logrado que conectara con ella de una forma que hacía mucho que no sentía, por lo que se ha vuelto una de mis favoritas.