Este bomboncito debía sentirse como un chino en Etiopía en su respectiva gala de los oscars. Deseaba que todo acabara rápido para no ridiculizarse más con la culturista competencia que tenía, dura de pelar.

Tuve el valor de ver 4 bodas después de el Cake king-size de Love Actually, por eso de que es el mismo guionista y tal me atribuyo tanto mérito, y como los tengo bien puestos me puse a verla tras hacer mi testamento...

...Y que ideal está Hugh Grant, desafiando mi heterosexualidad con cada sonrisa, ¡y Andie MacDowell!, recordándome mis orientaciones amorosas en cada fotograma... Pero sobre todo, que belleza infinita de tópicos acaramelados que me demuestran que estas cintas no es sólo postre para niñas barbisoñadoras que desean su príncipe azul de dientes albinos. Una magistral lluvia de acuarela muy a tener en cuenta...