La escena de la cena cuando se descubre el pastel está fatal llevada, la supuesta sorpresa que pretenden no hace el efecto deseado. Todo es previsible y repetido.
Bebe un poco de la sangre del vampiro jefe y éste cae redondo. Vaya un jefe.
En la boda una tipa que acaba de convertirse en vampira consigue escapar de una familia de vampiros de siglos de antigüedad y de un grupo de personas lacayas.
La amiga rubita lleva 100 años con la morena pero para salvar a una tipa random que acaba de conocer da su vida.
La muerte de las dos novias vampiras es de traca, ¿De verdad sois vampiras? ¿No veis la pedazo lanza que tenéis al lado?
Muy bueno eso de tener estatuas y mierdas con lanzas y puntas apuntando al pecho. Sabéis que podéis morir siendo atravesados, y tenéis decorada la mansión con armas en vuestra contra, inteligentes que son.
Te vas a casar con una tipa que sabes que no quiere y la dejas tomar la sangre para que tenga poderes sin ni siquiera atarla o estar atento por si se rebota. Bravo.
¿Alguien se cree a la sirvienta mayor? Que lleva ahí años sin hacer nada y ahora que viene la tipa nueva aprovecha para revelarse.
Cómo no, todos los malos son blancos, y todos los buenos son negros, y seguimos con la agenda social al máximo.
Muy buen escondite el de la llave de la biblioteca, al lado de la puerta, jajaja, y para más inri dejáis que una tipa nueva deambule para ver todo desde el palco.
Una vampira con 500 años de experiencia no puede con una de 5 minutos de experiencia.
El final con las dos tipas como si fueran dos caza vampiras de cualquier serie random es de vergüenza ajena.