Vergüenza, palabra desconocida por parte de unos sinvergüenzas, y es que para hacerse rico, no hay que tener escrúpulos, aunque tengas que engañar a tu propia madre.

En este documental se ver perfectamente explicado, como si fueras un niño de 4 años, tal y como diría en Denzel en Philadelphia, como se ha llegado a la crisis actual, quienes fueron los culpables, como actuaron, y cuales fueron sus castigos.

Charles Ferguson crea un notable documental, con una estructura básica y fácil de entender, dirigido a todo el público, con una información contrastada y verídica, con pruebas tangibles y sin llegar a caer en la subjetividad moral.

Después de ver el documental, comprendes mucho, muchísimas cosas y tienes las ganas imperiosas de coger a más de uno por el cuello y darle su merecido, pero luego reflexionas y llegas a la conclusión de que algo va mal en esta sociedad, de que esto no puede seguir por este camino, y algún día, siendo fatalista, esto cambiará, de forma brutal, y todos lo pagaremos en mayor o menor medida.

El celebre dicho, mata a unos pocos y serás un asesino, pero si matas a miles, serás un dictador, se puede ajustar a este documental, donde si robas un poco, vas a la cárcel, pero si robas un montón, serás ministro de justicia, por lo tanto, ante esta locura, vuelvo a ser fatalista, o los pecadores pagan por su pecado, o todos acabaremos mal, porque somos conscientes de lo que sucede, permitimos, y en vez de emplear la justicia, solo miramos para otro lado, y eso, a la larga creara más injusticias, que cuando sean de proporciones dantescas, no se podrá parar.

Disfrútenlo, verán la cruda realidad, de personas que solo aman el dinero y su afán por poseer más y más.