Empezar diciendo que este engendro de película es un verdadero insulto a todos los fans de la serie, se han desentendido por completo del sentido y la gracia del original de Mel Brooks, para transformarlo en una simple parodia con muchas escenas de acción y tonterías varias.
Pero aunque la película es una verdadera incongruencia sin sentido, cuando terminas de verla, te queda la sensación de que no te lo has pasado tan mal. Esa sensación nos queda por una única razón: STEVE CARELL, este actor esta dotado de una gracia innata, es con mucha diferencia el mejor actor cómico que existe en la actualidad, no necesita de aspavientos ni gañotas para hacernos saltar la risa, con una simple bajada de cejas ¡¡¡ZASCA!!! ya te ríes.
Él y solamente él consigue mantener al espectador atento a la pantalla (repito que os olvidéis del personaje de la serie, por que si no cogeréis un mosqueo de narices), por que al director, no se le ocurre otra cosa que hacer que la película dure 1:45. Y no se exactamente quién fue el genio que decidió darle el papel de agente 99 (Barbara Feldon, que recuerdos) a Hanne Hathaway, pero me parece uno de los errores más grandes de la película, la chica no ofrece ninguna credibilidad y es muy fría.
Solo se me ocurren 2 buenas razones para ver esta película:

1a.- Si eres fan de Steve Carell.

2a.- sábado o Domingo por la tarde, pones todos los canales de la tele y solo dan telefilmes basados en hechos reales. Se te a estropeado el disco duro y la única peli que puedes ver es: SUPERAGENTE 86.
Antes de ver “Superagente 86″ os recomiendo que hagáis un visionado de la genial serie “The Office” en la que Steve Carell nos ofrece una amalgama de situaciones increíblemente cómicas (recomiendo que si no la habéis visto nunca, le tenéis que dar unos 3 o 4 capítulos, por que es una serie que cuesta de entrar).