Correcta, cuidada, elaborada pero a la postre mediocre e indiferente revisión del mito artúrico.
La película funciona, bien rodada, y ofrece lo que promete, mas nada más que eso. Reprochar que podía ser mucho mejor es lógico, pero injusto.

Es esta una película hecha para ser buena, una producción cuidadada, planificada, pero hay cosas que o se tienen o no se tienen, y que no se pueden provocar racionalmente, como intentó Bruckheimer
Contar con el guionista de Gladiator no es suficiente, se necesitarían también a Scott (en la mismo situación psiquico-emocional que cuando hizo Gladiator, que las variables podrían haberlo llevado a hacer otro Robin Hood), a Crowe, y habría que apartar a la Knightley, dios, que ahora recuerdo a quien me recordó Cate Blanchett en Robin Hood... No, si Scott igual hubiera hecho lo mismo que el Fuqua con este guión... No, más bonito, por lo menos.

Bueno, que para ser una buena película, para ganar Oscar (que ya sabemos que no son tampoco una garantía de calidad), hay que tener un algo, que o se tiene o no se tiene, y este intento de nuevo Gladiator no lo tiene, por más que se hayan fichado a Zimmer y a Franzoni. Tienes que tener alma, espíritu, y aunque en realidad no seas buena, dar la sensación de que sí lo eres, así se ganan Oscars, pero esta peli... tiene todo lo contrario, sin ser mala, siendo buena en realidad (no una maravilla, pero está decente), deja un regusto a... a nada, que no es normal.
La he visto muchas veces, pues la sacan mucho por la tele, y cuando salió y la alquilé la ví sólo, con mis padres y con un amigo... Y a pesar de haberla visto tantas veces, no se me queda nada, la olvido con una facilidad apabullante, pues no tiene ningún carisma, y cada vez que la veo, aunque no siempre sea entera, siento lo mismo, ni más ni menos, correcta película de aventuras, con su épica y sus romances, pero en plan discreto, no resalta nada, ni para bien, ni para mal.