Que conste que el intento de hacer pasar a Álvaro Mondego (Óscar Jaenada) por un Jack Sparrow (Johnny Depp) hispano no juega en contra de esta serie. Los primeros capítulos de "Piratas" son bastante buenos consiguiendo alcanzar altas cotas de comicidad. Lo malo es que parece que los creadores sólo habían pensado en una especie de miniserie porque cuando había que continuar el argumento se las acabó el fuelle. Para compensarlo, meten más personajes, le dan más carrete del necesario a Álvaro (su faceta como conquistador te resulta desagradable. Además es tan poco ocurrente como fuera de lugar) y hasta retuercen a los personajes para hacerlos pasar de buenos a malos y viceversa.

La historia acaba estancada, lo mismo que la especie de trío que se establece entre el protagonista con Pilar Rubio y Silvia Abascal que no hay manera de que arranque. A la postre acaba la serie desvariando, y lo peor, con un final tan abrupto, precipitado e incoherente que hasta te produce irritación. ¿Para eso he visto "Piratas"? Supongo que la razón de este cerrojazo estaba en el escaso seguimiento de la serie. Como no va a haber segunda temporada, ni se van a rodar más capítulos, frenada en seco y un final alternativo para cumplir, por muy decepcionante que sea.