Básicamente "El último escalón" sería como el resultado del cruce entre "El resplandor" (1980) y "El sexto sentido" (1999). Sobre este último algunos acusan a David Koepp de haber copiado a M. Night Shyamalan pero resulta que ambas películas se rodaron prácticamente en la misma fecha, a finales de 1998, y que incluso la que supuestamente ha plagiado se estrenó un poco antes. En definitiva, pienso que hubo tan sólo coincidencia. Porque aunque "El último escalón" se base en la novela de Richard Matheson del año 1958, "Stir of Echoes", me parece que los cambios son demasiados como para que se tenga el libro como una fuente de inspiración para una y para otra.

Aclarado este punto, qué os voy a decir, que yo me esperaba algo de terror, de casas encantadas pero lo que me encuentro es más bien un thriller sobrenatural. No es una mala opción pero reconozco que me ha decepcionado. "El último escalón" cuenta con el buen hacer de Kevin Bacon, un comienzo esperanzador y un par de sustitos si eres más impresionable. En cambio, su misterio es demasiado elemental y está poco trabajado, la fenomenología paranormal es tan excesiva como irrelevante para la historia, se decanta por un tono dulzón tipo "Entre fantasmas" (2005-2010) que no le sienta bien y añade personajes, el niño, y tramas que no aportan absolutamente nada.