El encuentro de Hitler con Mussolini en 1938 sirve como pretexto a Ettore Scola para contarnos las andanzas de dos tipos que, digamos para no desvelar la trama, cosa que es importante, no se encuentran muy cómodos en la Italia fascista, aunque a primera vista alguno no sea muy consciente. La película trata de ser crítica tanto con el pasado del país como con ciertos roles, el caso de la mujer, pero además de mostrarse demasiado caricaturesco, nuestro director comete la torpeza de vincular la política con lo social. Es decir, la figura de la mamma es muy anterior y por supuesto posterior a este movimiento político que en todo caso supuso más bien una modernización aunque sui generis para las féminas y no lo contrario.

La pareja de Sophia Loren y Marcello Mastroianni funciona bien, incluso tienen algún diálogo apreciable. Sin embargo, "Una jornada particular" tiene un planteamiento artificioso y en ocasiones se nota forzada y poco creíble. Por ejemplo, este amor de un día es excesivo como también el interés de él en su vecina, con lo que llega a hacerse pesado. Por supuesto, la parte más íntima que es casi grotesca (SPOILER). Cuando terminé de verla se me vino a la cabeza que hubiera sido infinitamente más natural y por ende, mucho mejor que los protagonistas hubieran sido dos mujeres. De todos modos mi consejo en especial para ella es que aprenda de "Mujeres desesperadas" (2004). Como curiosidad la hija menor es una nieta de verdad de Mussolini.