Cuando te cuentan un chiste y no te hace ni pizca de gracia, puede deberse a factores exógenos y endógenos.

Exógenos:

a) El chiste es malo.
b) El que lo ha contado no es un as del humor. Si intenta explicarlo, lo estrangulas.

Endógenos:

a) Eres un témpano sin sentido del humor.
b) Acabas de enterrar a un ser querido y no estás para coñas.

Cuando vi ‘Matrix’, salí del cine con la sensación del chiste malo, pero nunca me quedó claro el factor determinante. Con mi mejor predisposición, me he decidido a rescatarla. La sensación se ha visto amplificada. En mi opinión, las andanzas de Neo, Trinity, Morfeo y su señora madre, constituyen una de las más sobrevaloradas obras de la historia cinematográfica.

La Matriz describe un mundo donde cualquier cosa es posible; un mundo así resulta, literalmente, insoportable porque el caos elimina toda razón, más aún, todo sentimiento. En ese sentido ‘Matrix’ triunfa, pues me ha parecido inaguantable y fría como pocas. También cuenta con algunas de las interpretaciones más ridículas que recuerdo.

Trama: una supermente cibernética y maléfica busca dominar a la humanidad, aniquilar la verdad y la libertad. Sólo puede ser vencida por un programador de software mediante…el kung-fu y un compendio de filosofía new age tamizada por los Power Rangers. Matrix es control generado por ordenador para convertir al ser humano en… ¡pilas duracel! Sin embargo, Matrix engendra un humano concebido para destruirla. El mito edípico cyberpunk profetizado por un oráculo con pinta de maruja, cuyas reflexiones filosóficas presentan la misma profundidad que las de Patricia Conde. Además, todo es un chollo: curso de kung-fu décimo dan; curso de pilotaje... Aunque lo gordo es el curso de pseudo filosofía postmoderna para alumnos con adaptaciones MUY significativas.

Sigo lamentando que Neo no eligiese la puñetera píldora azul y nos haya colocado un supositorio rojo sin vaselina. Yo, como Reeves, he tenido un dejà vu. Otros ya señalan las evidentes influencias –o plagios- de que se valen los Wachowski para construir la exitosa ‘estética Matrix’. Al héroe se le demanda que libere su mente y lo abandone todo. Y tanto. Lo malo es que la mayoría de los espectadores parece haberle seguido.

Como película de acción me parece fallida por difusa, incongruente y aburrida. Sólo pensaba en volver a escuchar el ‘Wake up’ de RATM de los créditos y despertar de la pesadilla.

Pero ‘Matrix’ también cuenta con aspectos positivos, como una gran frase puesta en boca de Cifra: -Estoy harto de ese capullo (Morfeo) y de todas sus gilipolleces. Una estrella. Otra por la banda sonora, más que por buena, porque me gustan los Rage, Manson o M. Attack. Y una tercera por su hábil capacidad de embaucar. Muy a mi pesar, es una película importante.

PD. Suscribo una frase de Sines Crupulos (un saludo): ‘Todas sus frases son necias y todas sus escenas lerdas.’