La saga de X-Men en el cine ha estado llena de altibajos durante todo su recorrido. Con dos primeras partes muy interesantes, sobre todo la segunda, para mí la mejor de todas, Bryan Singer adaptaba la famosa patrulla al cine. La cosa se torció cuando en 2006, Synger pasó el testigo de la franquicia a Brett Ratner, dejándonos la totalmente prescindible X-Men 3: La decisión final. Dicha entrega dejó tocada a la saga, decidiendo explorar los orígenes del mítico personaje de todos los filmes, Lobezno. Y así, en 2009 nos llegó la horrorosa X-Men Orígenes: Lobezno, un auténtico despropósito que, a pesar de todo, funcionó en taquilla.

La saga estaba atascada, pero gracias a Mathew Vaughn y la supervisión del mismo Singer, X-Men se renovó explicando los orígenes de todos los mutantes. X-Men: Primera Generación fue toda una sorpresa, aunque no funcionó todo lo bien que se esperaba en taquilla, pero eso no desanimó al estudio a hacer otra entrega más. A pesar de que nos tocaría sufrir otra entrega de Lobezno, que servía como nexo para unir la nueva serie de películas.

Con X-men Días del futuro pasado comienza esta nueva etapa... ¿Está a la altura, o es otro desengaño más? Para empezar, el cómic en el que se adapta esta historia está protagonizado por Kitty Pryde, sin embargo aquí el protagonismo reside en Lobezno (otra vez), y ese es el fallo de la película: dotar a los personajes de siempre ese protagonismo sin centrarse nada en los secundarios. Personajes como Tormenta, Bestia o Picara simplemente desfilan por la película, sin ningún tipo de importancia.

La trama y los momentos oscuros están muy conseguidos, aunque no llegan a emocionar. Quizás el clímax final podría haberse mejorado, pero el resultado sigue siendo aceptable.

En el apartado actoral, Hugh Jackman ha nacido para ser Lobezno, y lo demuestra. Michael Fassbender es el auténtico roba escenas y está soberbio en su papel de Magneto joven. James Mcvoy, igual, otro gran actor. Jennifer Lawrence es una actriz que no goza de mi simpatía, pero debo reconocer que su Mística es de lo mejor de la película. Patrick Stewart, Ian Mckellen, Dinklage, Evan Peters, Halle Berry y Ellen Page, simplemente actúan de forma correcta, sin destacar, debido al poco peso de sus personajes. Mención aparte, cabe destacar el papel ridículo que tiene Mercurio, dotándole de un humor adolescente e infantil. Esperemos que el personaje mejore en la segunda parte de Los vengadores.

X-Men Días del futuro pasado no decepciona, pero tampoco llega a enamorar, ni es la película definitiva de la patrulla X, ni la peor. Para pasar el rato, sin emocionarse.