Esperaba más de "The Awful Truth" (me niego a escribir el título mal traducido al castellano), una película que se basa en la relación amor-odio de sus dos protagonistas y que está barnizada de un humor que en esta ocasión no me convence. Algunos ven diálogos inteligentes donde otros sólo escuchan chirridos, unos ven química y otros la ponen en duda... Y yo suspendo a Leo McCarey porque cuando una comedia no hace demasiada gracia no queda otro remedio que decirlo como es, me posiciono en el grupo de aquellos que respetan lo clásico pero si una comedia no arranca risas inevitablemente ha fracasado. A nivel de ritmo no se le puede protestar nada, está en la línea de ese tipo de comedias ágiles de los años 30, de no parar con una situación, desenredarse, para volverse a enredar. Sin embargo Cary Grant y la Dunne, forzosamente casados, separados y en proceso de volverse a unir, no me han convencido porque a su química a mí me parece que le faltan burbujas, o lo que es lo mismo, no me provocan fascinación alguna.

Qué le vamos a hacer, mientras lo del perro llamado Mr Smith (gran ocurrencia) para algunos es motivo para descojonarse yo he cerrado los ojos de vergüenza ajena, y aunque no se le puede negar su gran ritmo todo lo demás suma en negativo: el prometido que quiere vivir en el campo, la borrachera final, el doblaje en castellano de la versión que he visto yo (ya sé que esto concreto es pasarse), el profesor de música, el chucho... Son cosas ante las que me he quedado igual. Algunos diálogos son acertados y no se puede negar que sean dos seres humanos astutos, pero su inteligencia no es todo, no me han convencido, una lástima.