Producto juvenil que desde su sinopsis recuerda ya a clásicos románticos de los años 70 como Love Story (1970), En su reparto principal, dos estrellas que ya conocerán gran parte de su públicos objetivo como Cole Sprouse (chico Disney) y Haley Lu Richardson (chica de Ravenswood, serie de fenómenos paranormales con adolescentes) que nos recuerda lo manido de la fórmula, que va a tiro hecho y minimizando riesgos, como suele pasar con el cine comercial actual norteamericano.
Es por ello que quien tenga ya una edad y busque huir de lugares comunes del género no va a disfrutar, porque da la impresión de que se ha visto antes y con mejor resultado. Pero para quienes tienen a sus hijos o familiares en plena edad del pavo con este film les entretendrán un rato, en especial si son fans de los actores que salen, y que son carne de las antiguas pegatinas de Superpop.