Sin mucha coherencia en su historia pero con dosis de entretenimiento garantizado para los más chicos, “La era del hielo 5” (2016) ofrece un panorama a considerar pero con divertimiento limitado para los pequeños en desmedro de los grandes.

Principalmente esto ocurre porque en momentos la película pese a ser breve (hora y media) se torna larga y hasta un poco tediosa, lo que redunda en algo de aburrimiento en los más grandes y distracción en los niños. Está comprobado que el cine independiente del formato y las temáticas, aunque sea infantil debe dejar algo más que los lugares comunes y moralejas, y en la saga de “La era del hielo” hace rato eso dejó de ocurrir.

Y es que si bien esta aventura animada tiene como sus predecesoras, un sucesivo peldaño a la baja en cuanto a calidad, aquello queda más en evidencia al hacer el siguiente balance: ¿Te hace reír? ¿Te emociona? ¿Qué fue lo que más te gustó?. Esto puede consultarse en un público tan honesto como el infantil y obtener resultados aceptables, pero un mínimo de madurez generará saldos visiblemente desfavorables.

El recurrente exceso de colores y búsqueda de nuevos y ruidosos factores de hilarancia atentan contra el corazón de la cinta original de comienzos de milenio; su sencillez quedó opacada por la estridencia y sus delicados toques de originalidad y emoción, literalmente, perdidos en otra época. Pero si a los niños aún les atraen los cuadros de la ardilla persiguiendo su anhelada bellota, respételo, aun cuando está advertido.

¿Otro yerro? Parece que la saga aún no acaba. Eso sí es una falta de respeto, aunque haya público para todo.

Recomendación:
Débil. Cuesta abajo en la rodada para una saga innecesaria que es el pálido recuerdo de su génesis.

=Cité de Lord Buyinski= www.buyinski,wordpress.com