Puede ser, quién sabe si los creadores de "Regreso al futuro" se inspiraron en algunas de las situaciones que se desprenden de esta película. Lo que está claro que tuvieron que echarle mucha imaginación pues, en ese supuesto, mejoraron bastante lo que aquí se nos sirve.
Los ingredientes que aquí son ofrecidos, conforman una receta que aunque insulsa, nos está mal para dársela a amantes de la gastronomía. Sin embargo, poco presupuesto -imagino-, unido a regulares actuaciones, llevan a un resultado que apenas se erige en algo llevadero.
Para empezar, suelo degustar con bastante ánimo productos ochenteros, pero la presentación de este film es muy mejorable. Viajar al pasado, en este caso al contexto de la Primera Guerra Mundial debe estar muy justificado, y aquí se nos presenta la aventura sin darnos explicaciones. Por mucho que estos productos no tengan mucha lógica, al menos no quiero que se nos deje en la duda de los motivos de esos viajes de ida y vuelta. Si que es cierto que no es fácil asemejarse -a nivel de calidad- a ese universo de Doc, ni al encanto logrado en otros films de la década, pero al menos me hubiera gustado que las relaciones que se establecen entre los personajes sean más, no sé, estén más conseguidas.
Porque esto último que he señalado viene siendo ya un problema de guion más que un inconveniente de contar con bajo presupuesto, lo cuál hasta cierto punto puede ser más perdonable.
Pero claro, al final los efectos especiales dejan mucho que desear. Muy rudimentarios para la época.
A pesar de los pesares, está bien haber añadido a la falta de condimentos, algo de sal y a mediados de la cinta, en una situación de Primera Guerra Mundial -algo no muy atractivo, sentimentalmente hablando, la verdad- se siente que la receta está algo mejor que en otros tramos de la película asegurando ésta cierta diversión, incluso bueno no está mal la cinta en su conjunto.
Pero claro, no sé puede considerar estar viendo una peli película salvable por el mero hecho de que nos resulte entretenida veinte minutos.
Porque aquí nos meten una BSO, que vaya, no concuerda con lo que se nos está contando. Que si, que tiene una baja puntuación media que se ajusta a la realidad... que es malilla y tal... vale eso se perdona -incluso se puede aprobar-, pero lo que no tiene perdón es que se le ponga tan pocas ganas cuando realmente había medios -no presupuesto- para llegar a más.