A decir verdad es un film que puede resultar muy interesante no por su historia, ni su guión ni nada más allá que ver la típica de acción-suspense. Simplemente es por los actores protagonistas. Ver a De Niro y Pacino es una oportunidad que no se suele presentar.
El arranque se hace por lo general tedioso y excesivamente lento, conforme avanza la trama la situación da un giro obteniéndose momentos de tensión destacables y contando con interpretaciones más que aceptables.
Un desenlace totalmente acertado y asesinatos constantes son la piezas culminantes de Asesinato justo, que resulta pasable sin más, pero que logrará enganchar al público menos exigente y al espectador que se conforme con ver a dos grandes del cine actual. Aceptable.

Como motivo para que se animen a verla es el cartel oscuro que presenta, creo que con eso merece verse, además no es pretenciosa y cumple en entretenimiento en su media hora final.