No es la primera vez en el género fantástico en la que se explora el miedo atávico (innato al ser humano y probablemente a muchos seres vivos) a la oscuridad, con una criatura que vive en ella. Ahí están “Pitch black”, “En la oscuridad” y “Ellos”, entre otras.
No poder ver lo que tenemos delante hace que estemos alertas ante cualquier peligro, y la imaginación se dispara inventando criaturas donde no hay realmente nada. Supongo que por eso es por lo que a mucha gente le da miedo.
El film desarrolla muy bien el genial corto viral de internet, que era muy simple y al mismo tiempo daba bastante miedo.
Las escenas de terror puro están muy conseguidas y juegan muy bien con la luz y la oscuridad, ofreciendo una buena variedad de situaciones en las que esta terrorífica criatura hace de las suyas.
El film logra inspirar inquietud y tensión. Puede llegar a dar miedo en las condiciones adecuadas de visionado. Así que ya solo por eso tiene algo de mérito.
De todas formas podrían haberse estrujado los sesos un poco más porque al final les ha quedado demasiado corta y nos dejan con ganas de más. Deberían haber completado la historia con más personajes, más investigación sobre lo que realmente es Diana y más escenas de miedo. Me ha gustado, pero sabe a poco.
También hay que reconocer que algunos momentos son un poquito predecibles.
En conclusión, es una película de terror estándar, muy entretenida y con buenos momentos, aunque tampoco tan potente como las que ha dirigido su productor ejecutivo James Wan en los últimos años.
La recomiendo a todos los seguidores del género.