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Voto de lewundowski:
9
Comedia. Infantil Kevin McAllister es un niño de ocho años, miembro de una familia numerosa, que accidentalmente se queda abandonado en su casa cuando toda la familia se marcha a pasar las vacaciones a Francia. Kevin aprende a valerse por sí mismo e incluso a protegerse de Harry y Marv, dos bribones que se proponen asaltar todas las casas cerradas de su vecindario. En cuanto su madre lo echa en falta, regresa apresuradamente a Chicago para recuperar a su hijo. (FILMAFFINITY) [+]
27 de diciembre de 2013
5 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Apoteósica obra de Colombus que, en un completísimo ejercicio de dirección, se encumbra en todos los registros condensándolos en la sublime interpretación de todos –o casi- los personajes. El desamparado Macuklin logra que el espectador empatice, ojo, con un aparentemente incomprendido y malcriado chaval del norte de Chicago que vivirá sus días más duros en vísperas de Navidad. La sublime interpretación de los secundarios –algunos de lujo como el verdadero hermano de Macuklin- no se ve ensombrecida por el regulero papel que encarna el ladrón más alto. Un descuido de los encargados del casting que, bien sabe Leslie Nielsen, eligiendo a Kareem Abdul Jabbar se podría haber logrado una mayor simbiosis y contraste con el genial Joe Pesci.

La película logra su punto cumbre en el ataque de histeria de una Catherine O’Hara desesperada en donde su encarnizada lucha por volver a casa acorrala psicológicamente a un pobre vendedor de billetes de avión. El guionista, en un ataque de lucidez, lo resuelve con la entrada en escena del malogrado John Candyn.

En definitiva, Colombus se la saca en un filme completísimo creando una obra anacrónica ambientada desde el difícil y estigmatizado mundo navideño. Una cinta donde no debía haber categoría sin premio. Desde una apoteósica banda sonora que bien firmaría Hans Zimmer hasta el papelón de un Macuklin que sólo el auge de las concienciadas posturas en favor de nuevas convenciones sociales auspiciadas por las numerosas, excesivas y demagógicas películas pro-neighborhood de un trasnochado Spike Lee a principios de los noventa dejaron sin la preciada –y merecida- estatuilla. Y es que ya sabemos que a la Academia le gusta quedar bien con todos. Mal momento para ser un chico de los barrios altos.
lewundowski
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