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España España · Barcelona
Voto de Ochentero:
1
Comedia Pierre Brochant y sus amigos organizan todos los miércoles una cena que es una especie de apuesta: el que invite al idiota más extraordinario será el ganador. Una noche, Brochant está pletórico: ha encontrado una auténtica joya, un idiota integral. Se trata de François Pignon, un chupatintas del Ministerio de Finanzas con una gran pasion por las construcciones hechas a base de cerillas. Lo que Brochant ignora es que Pignon es un ... [+]
23 de septiembre de 2009
62 de 118 usuarios han encontrado esta crítica útil
Me recomendó un familiar está comedia como una gran película para reírse mucho sin parar.
Aun estoy esperando verle la gracia. No tiene ninguna. Es una película aburrida, idiota (Que ironía) e incluso tristemente infantil. Porque tiene esa típica actitud infantil de reirse del que no nos gusta o no entendemos cómo actua.
Mi hermano y yo la pusimos en el entonces video VHS atentos a ver cuando soltaríamos la primera carcajada ("Ahora viene, ahora viene...", con esa cara de tonto que se te pone cuando preparas la boca para reír aun cuando nada ha comenzado a hacerte gracia).
Pasada la primera media hora-3 cuartos (la mitad de la película) empezamos a mirarnos con cara de: Bueno, empieza ya lo gracioso o que? Teníamos la sensación de que seguiamos en la introducción de personajes.
Y poco después empezamos a darnos cuenta de qué es lo que le hace tanta gracia a la gente que le gusta esta película.
Es una película de esas que se supone que se ríe de los tontos, de personas inferiores a ti. "Ay, que gracia! Este tío es tonto, es inferior a mi, que pena da, vamos a mofarnos de él y a humillarlo para nuestro placer!".
Pero es que resulta que los "idiotas" de los que se quieren reír, pues... ni tan solo son inferiores. Es gente normal y corriente, aburrida y vulgar, trabajadora y "puteada", de esos que abundan a nuestro alrededor. Es decir, una pobre gente, cumplidora y formal, que solo le falta que lo tachen de "idiota". Está claro que, en nuestra sociedad, el cumplidor y honrado es el tonto.
El "idiota" principal es un pobre vendedor, buena persona pero bastante torpe (se le caen las cosas y explica cosas aburridas, eso tiene gracia?) que intenta vender un producto con poca salida de forma poco afortunada.
Y los otros no pueden parar de reír mientras el hombre intenta vender y explica sus simplezas (que es que ni siquiera me parecen idioteces, son simplemente cosas banales).
El ser humano es así. Le divierte reírse de las personas de su entorno, y para ello intenta colgarles etiquetas que los humillen y los degraden (Como por ejemplo: "Este es idiota". Una persona torpe se merece que le llamen idiota y lo humillen riéndose de él? Así va nuestra sociedad...).
A mi me hace gracia la gente que "hace el idiota", no que "es idiota" (Los que no tienen mucha habilidad para relacionarse con su entorno no me hacen gracia, me dan un poco de lástima en realidad).
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Ochentero
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