Tampoco me voy a poner excesivamente serio con una película que no lo pretender ser y que solamente quiere divertir de forma gamberra. La misma dura muy poco y es una parodia sobre unas elecciones americanas y un retrato de políticos que quieren triunfar, hay una mezcla muy evidente de unos chistes que son muy tontos pero otros que son divertidos e irónicos porque nos ofrecen lo que muchas veces los políticos son en realidad.

La película pasa volando y las situaciones descritas son a ratos incongruentes, a otros ratos se nota la intencionalidad irónica y como la película no pretende más tampoco voy yo a exigir seriedad de un dúo de cómicos como Will Ferrell y Zach Galifianakis.

Un 5 por el retrato cómico de políticos que se nos presentan a menudo como seres perfectos y eruditos cuando en realidad y en muchas ocasiones son los culpables de todos nuestros problemas.