Reconozco haber visto "Ju-on; The Grudge" en versión japonesa antes de cualquiera de las películas de terror "japonés" que saltaron a la fama en el siglo XXI.

Y reconozco que me giñé de miedo, al ver los fantasmas esos japoneses.

Ahora me he dado cuenta, que en realidad, que para los occidentales, cuanto menos entiendes, más miedo te da. O sea, una usted que a) todos los japoneses parecen iguales, de manera que no sabes si aparece en imagen un detective, una trabajadora social, o un abuelo con demencia. b) si la película aparece fragmentada en episodios que se siguen sin orden, ni concierto, da más miedo porque no entiendes nada ---> ahí tiene el éxito de "Ju-on; The Grudge".

Desgraciadamente, nos hemos recuperado de los primeros sustos, y las secuelas, remakes, etc, no ofrecen absolutamente nada nuevo: un montón de muertes, en un 100% exactamente iguales a la primera película: el niño Toshio, que maúlla, la madre que se retuerce haciendo ruidos de pedorretas... Cansancio extremo.