14 de abril de 2009
12 de 13 usuarios han encontrado esta crítica útil
Burt Lancaster ofrece una increible interpretación (suma y sigue) de un solitario pobre y cobarde hombre que con la llegada de una vecina que huye de su Canada natal, consigue ponerle a su vida un broche final digno de análisis psiquiátrico. La vecina es nada más y nada menos que Susan Sarandon en sus años mozos, dando vida a un personaje obsesionado por dejar atrás su pasado, absorver información (al más puro estilo cortocircuito) y convertirse en una buena crupier que le lleve hasta Mónaco. La historia es muy buena, así como la dirección. Le falta fotografía y decorados, por lo demás está bien. A disfrutar.
Saludos a todos.
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?