En Magnolia, Paul Thomas Anderson y salvo un pequeño respiro al final, imprime un ritmo a la película pocas veces visto en otros directores, puede llegar a estresar o a hacer desabrocharse el botón de arriba de la camisa, dando la sensación de que aún estando a mitad de la película, todo va a explotar en cualquier momento. Esta sensación aunque parezca que no es parte de su encanto. La que nos ocupa sin embargo posee (aunque no de forma tan marcada) esta cualidad pero sin embargo resulta estresante no en tan buen sentido, sino de ponerte de los nervios sin estar disfrutándolo tanto.

Posiblemente esto sea lo que más me haya privado de conectar con el film y posiblemente sea por un tema subjetivo de rechazo visceral durante toda mi vida a los mentirosos compulsivos y zumbados varios entre los diversos cualificativos que podríamos darle a los diferentes personajes de la película. Lo que no se le puede negar al director en todos sus trabajos es la originalidad y por ello me guste más o menos lo que haga siempre voy a seguir viéndolo porque no te deja indiferente y siempre se agradecen cosas distintas. Aparte de que técnicamente, en todo el apartado de juego de luces, cámaras e incluso BSO, aunque choque en ocasiones por poder parecer experimental, acaba resultando atrayente cuanto menos.

Si bien es cierto que pese a lo comentado, los personajes pueden resultar en algunos aspectos interesantes, que ese cúmulo de extraños antisociales puedan tener algo de encanto escondido, en general su concepción y la historia que nos narra peca de bastante pretenciosa, queriendo vender más profundidad de la que realmente tienen. Adam Sandler fue aclamado por su papel por los mismos que lo defenestran en todos los demás, cuando yo no lo veo muy diferente a lo acostumbrado, con esa mezcla de retarded y explosiones de carasas y saltos. Nunca ha sido un gran actor y cada vez se fabrica películas más ridículas donde es el yerno perfecto mezclado con momentos que firmaría el peor Eddie Murphy, pero creo que tiene papeles mejores como el de En Algún Lugar de la memoria o incluso en 50 primeras citas.

Resumiendo: que entre unas cosas y otras no he acabado de disfrutarla pero se agradece su originalidad y el buen hacer del director, cosas que salvan la cinta.

Nota: 5'5

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