Valiente "escoria" la que se me presentó. Si bien soy consciente del presupuesto que tiene esto, y que en absoluto pretende ser un corto serio, no puedo evitar pensar que quizá he desperdiciado 20 minutos de mi tiempo. Si bien tiene sus puntos buenos (la película tiene su gracia, porque la tiene), no puedo evitar fijarme en algunos fallos, como la música electrónica repetitiva y mala, hay temas de este estilo de música mucho mas potables, la larga presentación de algunas escenas que hacen alargar el corto, amenizadas con esa música electrónica tan agradable, la abominable sobreactuación de absolutamente TODOS los actores, y sobretodo, el asco que da el estereotipo de homosexual. En conjunto, una idea que tenía los suficientes recursos, y que era original, se convierte en un dolor de cabeza por tanto techno, tanto gay chupando chupa-chups y en general por un guión que para mi gusto no funciona. ¿Culpa? Adrián Cardona, lo siento, pero creo que todos los fallos que se ven en la película, los podría haber subsanado el director.

Cordiales saludos, y no podía irme sin mencionar, a la muchacha del principio del corto, ¡que está rematadamente buena coño! Todo hay que decirlo.