Haz click aquí para copiar la URL

Dulce y melancólico

Comedia. Drama América, años 30. Emmet Ray es un genio del jazz, un guitarrista magistral que vive obsesionado por el legendario Django Reinhardt. Sin embargo, en cuanto baja del escenario, se convierte en un tipo arrogante, zafio, mujeriego y bebedor. En definitiva, aunque sabe que es un músico con talento, también sabe que su licenciosa vida, su tendencia a meterse en problemas y su incapacidad para comprometerse le impiden alcanzar la cima ... [+]
<< 1 4 5 6 10 13 >>
Críticas 62
Críticas ordenadas por utilidad
4 de marzo de 2007
7 de 11 usuarios han encontrado esta crítica útil
si hubiera tenido argumento. Acordes y desacuerdos es una película interesante, con diálogos geniales marca de la casa y momentos (cómicos y dramáticos) realmente logrados. Me encanta el estilo de documental que Allen le da a la película y los actores están soberbios: Sean Penn se sale en la recreación de un muy antipático personaje que, como él, tiende a la sobreactuación; Uma Thurman también brilla en un rol muy breve que hoy interpretaría Scarlett Johansson, y Samantha Morton, pues tres cuartas de lo mismo. Sale tan poco que no me atrevo a criticar ni aplaudir su nominación al Oscar.
Es una pena que Allen no se haya molestado en elaborar un argumento para su película, que podría haber sido la mejor de su carrera si no fuera porque acumula minutos y personajes sin sentido. Una pena.

Lo mejor: Los tres actores principales y algunas partes del guión.
Lo peor: No hay argumento, y el ritmo es muy irregular.
Sibila de Delfos
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
20 de julio de 2005
4 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Queda claro viendo sus más recientes trabajos, que el cine de Woody Allen está entrando en el típico bache del director maduro, pues sus más recientes comedias dejan bastante que desear en comparación con sus grandes obras. Pero he aquí que "Acordes y Desacuerdos" merece formar parte de su segundo grupo de películas que podríamos catalogar como excelentes, por detrás de las geniales.

A través de diversos testimonios de entendidos en Jazz, nos cuenta la vida y obra (y gamberradas) de un guitarrista imaginario. Borracho, sádico con los animales, inmaduro y cobarde, alguien desagradable de tratar pero genial en su música. Se nos plantea la eterna duda de si merece la pena apreciar a alguien por su arte cuando como persona es un verdadero asco. Una reflexión sobre la vida y el arte que deja un estupendo sabor de boca y gana a medida que se recuerda.

Sin duda las interpretaciones de Sean Penn y Samantha Norton son de las mejores que se hayan visto en una película de Allen, que ya es decir. Él logra transmitir todo lo tragicómico de su personaje además de tocar convincentemente la guitarra, pero lo de ella es magistral como logra componer un personaje únicamente a base de miradas y expresiones.

Como recomendación final, escuchar un poco más de la obra de Django Reinhardt, el objeto de admiración del protagonista.
Deacon
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
23 de noviembre de 2007
4 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Acordes y Desacuerdos es una de esas películas que resulta recomendable para cualquier amante del buen cine, pero que se torna en ineludible si además de cinéfilo eres amante de la buena música y más concreto del Jazz.

Yo personalmente, aunque me encante la música Jazz, no soy ni de lejos uno de esos entendidos que parecen conocer la vida y milagros de maestros como Duke Ellington, Coltrane o Django Reinhardt; sino que soy más bien un aficionado a ciertas canciones y ciertos discos. Así que como no, a Ray Emmet ni lo conocía, ni me sonaba de lejos siquiera. Fue entonces cuando me topé con este trabajo de Allen, mezcla de biopic y documental, y tuve la oportunidad de acercarme a él.

Ray Emmet (Sean Penn), es un genial guitarrista de Jazz al que solamente hace sombra el que esta considerado como el genio entre los genios, Django Reinhardt. Aunque Emmet encima del escenario es una persona que brilla por su virtuosismo, fuera de él es un hombre, malhumorado, barriobajero, alcohólico y bastante crápula con las mujeres. Mientras en su música vuelca su pasión y su calidez, su trato con las féminas es en cambio gélido y claro; él siempre les advierte que no traten de enamorarse ni nada parecido, porque como artista que es, tiene que ser un hombre libre y sin ataduras. Pero un día llega a su vida Hattie (una maravillosa Samantha Morton), una chica muda y algo retrasada con la que se encariñará más de la cuenta.

Así que como ya os he dicho, a medio camino entre el biopic y el documental, Woody Allen nos cuenta la insólita vida y anécdotas de este genio de la guitarra al que tantos admiraron y pocos conocieron realmente. Por cierto; ¿saben por qué a semejante genio lo conocieron realmente tan pocas personas?, os lo pongo en Spoiler por si os ocurre lo mismo que a mí para no quitarle magia a la cosa. (*)

Poco más queda por decir; de nuevo una dosis de buen cine, otra buena banda sonora, unos buenos actuaciones, y una fluidez y escenas dignas del mejor Allen. Ya saben, ¡¡a disfrutarla!!
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
HEIFER
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
4 de marzo de 2011
4 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Esta película habla del arte con tanta claridad que si uno tiene la desgracia de verla siendo sensible al arte se queda atrapado de tal manera que no puede evitarlo. Me ha hecho reírme a carcajadas, llorar, pensar... y todo con una sonrisa de oreja a oreja. No quería que se acabara.

¿Cómo puede haber gente que no sea sensible al arte, y a Woody Allen?
anxova
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
11 de agosto de 2007
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Una genial película, de las mejores de Woody Allen. Sean Penn está que se sale en el papel de este grosero pero genial guitarrista, que recuerdas a veces que La aristocracia del barrio no tiene porqué ser distinguida ni elegante. El tío se pasa el día matando ratas en el vertedero, que, una vez muertas, no se priva de agarrar y lanzar a diestro y siniestro a las mujeres de dudosa categoría que tienen la bondad de acompañarle. Penn, como ya he dicho, está genial, creo que es uno de los mejores actores del mundo mundial, junto a Dustin Hoffman, De Niro y esos que siempre cito en mis extrañas críticas. Tuve la suerte (o la desgracia, según se mire) de ver la mitad de la película doblada y la otra mitad en V.O.... cosas del TDT, SDT, DDT o el dedete de la tía, cómo quiera que se llame, que funciona como el culo. Pero mejor, así pude escuchar el maravilloso y perfecto doblaje de Jordi Brau/Brou/Brao, un crac de la profesión y uno de los motivos, junto a Ricard Solans y Carlos Ysbert, por los cuales me levanto cada día de la cama (es una exageración, una broma, espero que se sepa entender). La mudita es una chica tan tierna y bonita (sí, BONITA) que me casaría con ella esta misma tarde, y además sale el tío de Sin rastro, Anthony LaPaglia... ¡lástima que no fuera James Gandolfini!
En resumen, la película es fantástica, Allen consigue un retrato maravilloso, tierno y gracioso a la vez, del mundo de los talentosos artistas desgastados y viciosos, demostrando una vez más que se merece el cielo. ¡Viva Woody Allen, Sean Penn, Gandolfini, Brau y Solans! ¡Y Joan Pera!
Hoffman
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
<< 1 4 5 6 10 13 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow